Como cada año, David Laron, Director General del Correo de Israel, llegó a la explanada del Muro Occidental y entregó al Rabino del Muro Occidental y de los Lugares Santos, el Rabino Shmuel Rabinovitch (shlita), el paquete de cartas dirigidas a Dios que fueron enviadas desde todo el mundo y recogidas por el Correo de Israel durante el año pasado (5784). Las cartas fueron entregadas al Rabino del Muro Occidental para ser colocadas entre las piedras del Muro y llegar a su destino en vísperas del mes de Tishrei.
Cada año, se envían cartas desde diversos países a ‘Dios’, con la esperanza y oración de que lleguen a su destino, incluso sin una dirección precisa. Las cartas se envían a ‘Dios’, ‘God’, ‘El Señor’, entre otros nombres, acompañadas de direcciones como ‘Jerusalén’, ‘El Muro Occidental’, ‘La Tierra Santa’, etc.
Este año, se ha recibido una cantidad menor de cartas en comparación con años anteriores, pero con una amplia distribución geográfica de los países de origen, encabezados por EE.UU. y Rusia, además de otros países como Canadá, Brasil, Chipre, Polonia y una única carta enviada al Muro desde Israel.
El Rabino Shmuel Rabinovitch (shlita), Rabino del Muro Occidental y de los Lugares Santos, comentó: “Es un honor para mí recibir aquí las cartas que personas de todo el mundo han enviado a Dios y colocarlas entre las piedras del Muro, un lugar que es la Puerta del Cielo, por donde pasan todas las oraciones. Especialmente este año, necesitamos la bendición: ‘Que termine este año con sus maldiciones y comience el nuevo con sus bendiciones’, rezando por el regreso de los secuestrados sanos y salvos, por la paz de los soldados y heridos, por la paz y unidad del pueblo de Israel, y por una buena inscripción y firma en el Libro de la Vida”.
David Laron, Director General del Correo de Israel, añadió: “Nunca sabemos qué contienen las cartas enviadas a Dios por correo, y siempre respetamos la privacidad sagrada de quienes enviaron una oración personal. Este año, estoy seguro de que, entre las oraciones personales, está presente también la oración común para todos nosotros: el pronto regreso de los secuestrados, la pronta recuperación de los heridos de cuerpo y alma, el regreso seguro de los evacuados a sus hogares, y la paz de los soldados que nos protegen en los distintos frentes”.